Con grandes influencias del flamenco, el jazz y la bossa nova en cada uno de sus fados, Mara ha mostrado el crecimiento de la música tradicional portuguesa, que comparte la ilusión de reinventar un nuevo día cuidando el pasado y las melodías más populares.
Descalza sobre el escenario, Mara ha mostrado la trascendental conexión que le une con su público en cada actuación, al que ha transportado hasta Portugal a través de un viaje cargado de intimidad y pasión con cada canción.
Contrabajo, bajo eléctrico, guitarra flamenca, percusión y guitarra portuguesa se suman a la delicada y evocadora voz de Mara para trasladar una imagen del fado alejado de la tristeza y melancolía.
Alcázar de San Juan se ha transformado la noche de este miércoles en la región de Alenteixo, con la voz suave y los fados íntimos y personales que han sonado en los jardines del Hotel Intur.